Durante la jornada de ayer hubo un gran movimiento en el fútbol chileno. El Tribunal de Penalidades determinó duras sanciones contra los árbitros que estaban involucrados en el complot preparado contra Javier Castrilli.
En primera instancia se determinó que Francisco Gilabert no tuviera algún castigo. El juez del duelo entre Huachipato y Deportes Copiapó, autor de los audios filtrados, no tendrá sanción por lo vivido hace algunos meses. El árbitro nacional quedó absuelto del caso.
Mientras, uno que recibió una fuerte sanción es Cristian Droguett. El juez chileno recibió un castigo de 30 partidos sin poder arbitrar. El réferi estuvo involucrado en el VAR del duelo entre Huachipato y Deportes Copiapó, cuando ambos clubes se enfrentaron en la Liguilla del 2021 en el CAP de Talcahuano.
Por último, el que recibió el mayor castigo es Felipe Jerez. El asistente chileno fue acusado como el principal artífice del complot contra Javier Castrilli, para que el argentino deje su cargo como jefe de la Comisión de Árbitros. En total, Felipe Jerez sufrió una sanción de 40 partidos sin poder dirigir.
