Pese a que solo se informó la situación a través de declaraciones formales a través de las redes sociales, durante los últimos días se dieron a conocer detalles de los malos momentos vividos por Robbie Robinson, antes de abandonar la concentración de la Roja en Juan Pinto Durán.
Argumentando razones personales y señalando que debe reflexionar sobre cuál selección va a defender, el jugador de origen estadounidense habría tenido una experiencia traumática en el breve tiempo que tuvo de trabajo en el elenco dirigido por Martín Lasarte.
Así lo reveló el periodista Cristian Caamaño. El profesional detalló como fue la participación de Robinson en el camarín de la selección chilena: “Su interacción se veía reducida a muchas risas en el almuerzo y la cena y algunos comentarios en las prácticas. No mucho más. Llamaba la atención que en los entrenamientos no quisiera lucirse demasiado”, introdujo.
Fue entonces que situó un punto de inflexión para el jugador: “Todo el panorama cambió el miércoles. En la Selección empezó a preocupar en cierto modo su poca interacción con los compañeros. Por ello, Martín Lasarte y Mauricio Isla, en la conferencia del mediodía, trataron de explicar como lo estaban tratando de integrar. Ya era todo un tema en la concentración que se mostrara tan apagado”, explicó en Deportes en Agricultura.
Tras eso, contó que a diferencia de sus compañeros que se subían al bus: “Robinson no aparecía. No atendía tampoco el teléfono de su habitación. Con el tiempo de espera cumplido, los buses salieron a Pinto Durán, sin el futbolista del Inter de Miami, que permanecía en la habitación. Allí se tomó la decisión de que algún integrante del cuerpo administrativo subiera a la pieza”.
De ahí en más, Caamaño relató la dramática situación que vivía el futbolista de la MLS: “Cuando ingresaron a la habitación, Robbie estaba angustiado. Con los ojos vidriosos y sin poder expresar palabras. Totalmente sobrepasado y muy tembloroso. Después de un buen rato, se logró calmar y explicar la situación”, habrían indicado fuentes al interior de la selección nacional.
“Mientras esto ocurría en el hotel, Lasarte y sus colaboradores se iban enterando de lo que estaba sucediendo. Los llamados se sucedían. También se tomó contacto con la gente de Inter de Miami para ponerlos al tanto de lo que estaba ocurriendo. En ese momento se tomó la decisión de que volviera de inmediato a Estados Unidos”, profundizó el comunicador.
Finalmente, el comentarista explicó que desde un inicio la experiencia vivida tuvo momentos de presión: “La verdad es que todo lo que estaba viviendo lo sobrepasó sicológica y futbolísticamente. No estaba quizás preparado para todo esto. Que se lo reconociera, que se generaran tantas expectativas”.
“Nos contó muy extrañado que lo habían saludado el piloto, las azafatas. Allá, nos decía, salvo las estrellas de la selección o la MLS, son personas más bien desconocidas. Y acá se encontró con que todos le deseaban suerte y le pedían un gol”, concluyó Caamaño.
